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Pesadilla
Caminaba por la noche
con el sentido perdido,
una voz oí a lo lejos
que decía: ¡”Soy tu mi amigo”!.
Corría extenuada,
no encontraba mi camino;
su voz a mí me asustaba
con sus palabras y gritos.
con sus palabras y gritos.
¡Grité hasta el paroxismo.
¡Sufrí y creí que moría;
mi corazón galopaba
y el miedo me poseía!
Volví la cara al miedo
y a nadie yo pude ver;
sentí un gran escalofrío…,
y de un sueño desperté.
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